Devocional Semanal

¿Qué sucede cuando usted recibe a Cristo en su vida?

Dos acontecimientos importantes suceden cuando usted pone su fe en Cristo.

on 18/04/2017

"Pues Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando más en cuenta el pecado de la gente. Y nos dio a nosotros este maravilloso mensaje de reconciliación.”

2 Corintios 5:19

La palabra “evangelio” significa “buenas nuevas.” Pero el mensaje acerca de Jesús no es solamente bueno, ¡son GRANDIOSAS noticias! Muchas cosas maravillosas suceden cuando alguien pone su fe y confianza en Cristo. La cita bíblica de hoy menciona dos de estas cosas que son importantes. Leamos al respecto:

Volvemos a tener una relación con Dios; somos Reconciliados.

Pues Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo…” (2 Corintios 5:19a). ¿Alguna vez usted se ha encontrado en una relación rota? Se siente horrible cuando alguien a quien usted ama, no quiere ser su amigo, o inclusive, le considera su enemigo. Esta era nuestra realidad antes de conocer a Cristo. Todos nacemos pecadores; es nuestro estado natural ( lea Efesios 2:3). Nuestro propio pecado nos separó de Dios, pero en Su maravillosa gracia, Dios nos ofrece una oportunidad para reconciliarnos con Él. Pablo lo puso de esta forma en Romanos 5:10, “… nuestra amistad con Dios quedó restablecida por la muerte de su Hijo cuando todavía éramos sus enemigos…”

No Culpables; somos Justificados

“…Y nos dio a nosotros este maravilloso mensaje de reconciliación” (2 Corintios 5:19b). Los que no conocen a Dios no solamente están separados de Él, también son considerados culpables, y sujetos a la separación eterna de Dios, e irán al infierno. Pero por medio de la muerte de Cristo en la cruz, los que han puesto su fe en Él, ahora son justificados. Esto significa que usted ya “no es culpable,” y ha sido justificado. Piense en la culpa que ha sentido cuando ha hecho, dicho o pensado cosas como envidiar, chismes o asesinato. ¡Cuanta culpa y vergüenza habrá sentido! Ahora piense en todo el pecado del mundo y cuán maravillosamente Cristo voluntariamente tomó TODA la culpa y la reemplazó con justicia. Piense en cuán maravilloso es ser declarado “no culpable,” y el gozo que sus amigos y seres queridos sentirán cuando ellos experimenten esta libertad.

¡Vaya y háblales a las personas acerca de Jesús!

Estas dos cosas son motivación suficiente para compartir a Jesús con otros. No permita que el temor le impida compartir a Cristo con las personas. La recompensa es más grande que el temor. Que Dios le bendiga mientras se convierte en un “Embajador de Dios” llevando las Buenas Nuevas a un mundo perdido.


Ore esta semana:

Padre, ayúdame a entender, en lo profundo de mi corazón, cuán maravilloso es estar reconciliado Contigo, y ser declarado “no culpable” de mis pecados. Ayúdame a crecer espiritualmente, llena mi corazón con amor, y dame el deseo de compartir las Buenas Nuevas que son más grandes que cualquier obstáculo.


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